jueves, 18 de marzo de 2010

Diez y ocho

Soy legal, es oficial. Me podrán meter a la cárcel, saqué mi DNI, puedo votar y muchas otras cosas más que ahora puedo hacer porque soy adulta. En general ha sido un bonito cumpleaños, la pasé con mis mejores amigos (faltó Luciana, pero llega en 13 días), fui a cantar, rompí la dieta de tantas maneras y fui saludada por mucha gente que no pensé que me saludaría. Creo que lo mejor de toda esta experiencia fue cuando abrí mi cápsula del tiempo, Dios mío, me quedé impactada por lo que vi. Lo que pasa es que a los 15 años escribí una carta a mi yo del futuro donde describía cómo era mi vida, cómo me estaba sintiendo, que amaba a Leonardo di Caprio, entre muchas otras cosas. Guardé mi carta en una caja que juro por mi vida que no abrí hasta hoy, me quedé estupefacta. ¿Cómo pude pensar así alguna vez? Me sorprendí mucho al notar que muchas cosas que quise no se cumplieron, que mis predicciones (o algunas de ellas) nunca se dieron como yo pensé que se darían. Lo único que sí se cumplió por completo fue mi ingreso a la universidad, yo siempre supe que estaba predestinada a La Católica pero leer que esperaba que ya estuviera adentro y realmente estar adentro fue mágico, me sentí completamente llena, como si todo lo mal que me hubiera pasado no importase en absoluto.

No sé qué más puedo escribir, que ha sido mi primera semana de universidad y ya estoy severamente estresada por decir poco. Odio las matemáticas, las he odiado desde siempre pero hoy las odio más que nunca porque en serio no me entran en el cráneo. Tendré que solucionarlo de alguna manera. ¿Verdad?. ¡Ah, sí! Debería estar leyendo ética ahora mismo pero me da flojera porque bueno, es mi queridísimo aniversario de vida y creo que se me permite el lujo de no leer hasta que quiera. Pues sí, hoy seré irresponsable y correré riesgos.
En fin, seguiré disfrutando de lo poco que me queda de cumpleaños, fue definitivamente uno de los mejores de mi vida, me encantó. Si alguna persona que estuvo ahí ayer o hoy lee esto, pues gracias en serio mil gracias por lograr forzar una sonrisa de mi rostro al fin.

1 comentario:

Sinparametros. dijo...

Gracias a ti por poner una sonrisa en mi rostro tambien. Fue un cumpleaños genial para los dos.